En 1960 Wayne Sanger Green, natural de Littleton (New Hampshire, en Estados Unidos), fundó una pequeña revista para radioaficionados llamada «73». En la jerga del mundillo, «73» significa «saludos cordiales» y muchos la consideran como una de las promotoras de las tecnologías implicadas en la radio moderna. Cada número constaba de unas 300 páginas y estuvo nada más y nada menos que 43 años en activo, hasta que en Octubre de 2003 cerró.
Y sin embargo, esa revista llegó más allá. Aquellos primeros años, los 60, 70 y 80, fueron memorables para la tecnología: el auge de la entonces denominada «micro-informática» y el descubrimiento de un nuevo mundo de posibilidades por los ordenadores abría la humanidad hacia un camino que nadie había recorrido antes. Wayne y su revista 73 también son recordados por otro hecho: la intersección entre la radio y la informática personal.
Nadie podía obviar el poderoso atractivo con el que las máquinas comenzaban a tentar el mercado doméstico, y en Septiembre de 1975 Wayne Sanger funda la revista Byte, considerada una de las más influyentes del sector durante más de 30 años. La cobertura con sus artículos abarcaba prácticamente todo lo relacionado con la informática, desde los micro-ordenadores hasta los supercomputadores y sistemas de alto rendimiento. Toda esa tecnología era tan nueva, que todo estaba por escribir. Y por descubrir.
«El ordenador con interfaz gráfica por menos de $2500»
Así presentaron a sus lectores el Macintosh original. Lo más espectacular de aquella época, era que no se podía dar nada por supuesto. Los lectores, no conocían absolutamente nada (o muy poco) del mundo de la informática, a no ser que trabajaran en algún laboratorio o que su empresa contara con algún terminal. Eran ordenadores gigantes, ocupaban habitaciones enteras, por eso cuando la informática llegó a las casas se denominó «micro-informática», aunque tuvo implicaciones gigantescas para nuestra historia.
Byte se convirtió en legendaria por muchos aspectos. El principal era su carácter técnico, muy alejado del alcance de la mayoría de sus lectores. Os preguntaréis si eso tiene sentido… en aquella época, sí. El mundo de la informática era tan nuevo, que la gente no entendía de lo que se hablaba en los artículos. No entendía cómo estaban construidas esas máquinas, ni cómo hacían lo que hacían, así que los redactores de Byte tenían primero que explicar técnicamente lo que ocurría por dentro, para luego hablar de su funcionamiento por fuera.
Por ejemplo, en Febrero de 1984, publicaron su review del Macintosh original. Es la portada que tiene esta entrada como imagen principal. Es el mejor análisis que jamás he leído sobre el Macintosh. De hecho, creo que es el mejor análisis que jamás he leído. Dedicaron 58 páginas a explicarlo todo sobre él: la explicación de su funcionamiento a nivel hardware es sencillamente perfecta:
Explicaron todos los detalles de la nueva máquina, la diseccionaron con certeza de cirujano para mostrar cómo había sido posible construir «un ordenador con la tecnología del Lisa por menos de 2500$«. Y también les quedaba otro reto importante: hacer entender a la gente qué era un interfaz gráfico, un ratón, y cómo se utilizaba.
Digamos, por ejemplo, que seleccionamos el disco moviendo el cursor a su icono y haciendo clic en el ratón sólo una vez (figura 1a). El disco «se abre», mostrando una ventana que contiene iconos, cada uno de ellos corresponde a un ítem del disco. Para comenzar a usar el programa MacPaint, seleccionamos el icono de MacPaint y elegimos la opción del menú «abrir», tal como se muestra en la figura 1b (también podríamos haber abierto MacPaint haciendo doble clic en el icono).
En esta excepcional revisión del Macintosh por parte de Byte no sólo se quedan en el análisis técnico, también entrevistan al equipo de desarrollo implicado en su existencia. Estamos hablando de una entrevista nada más y nada menos que a Bill Atkinson, Steve Jobs, Andy Hertzfeld, Larry Kenyon, Joanna Hoffman, Burrell Smith, Dave Egner, Chris Espinosa, Steve Capps, Jerry Manock, Bruce Horn, y George Crowe. Aquellos que prefirieron ser piratas, a alistarse en la marina.
Byte, el reflejo de una época
Byte es uno de los mejores fragmentos del pasado que podemos recuperar. Nos mostrará una época de conocimiento, de emoción, de posibilidades que se creían casi infinitas y de todo un mundo nuevo visto desde los ojos de alguien que mira por primera vez. Incluso las portadas, son auténticas obras de arte. Dibujadas a mano, trabajadas, centradas en un tema principal. Durante años, la revista incluso las vendía como láminas a los lectores.
Evidentemente, no existe posibilidad de compra de los números antiguos de la revista, pero Internet a veces sabe conservar en ámbar lo importante, y podemos encontrar dos torrents con la colección completa.
- BYTE Magazine Collection (11,17GB): La colección completa escaneada a calidad normal. Se lee perfecto en cualquier iPad o Kindle (versión PDF).
- BYTE magazine full-res scans (32,9GB): La colección completa escaneada al máximo detalle (versión PDF).
Como veis la colección no ocupa precisamente poco, pero desde luego cuando leáis cualquier número, ya no podréis dejar de ojear el resto. Auténtico contenido gourmet de la tecnología del pasado para comprender mejor la de hoy.
Una respuesta a «BYTE Magazine, una ventana a otros mundos»
Bello artículo, muy bello!